Las mujeres de Barrio Nuevo, en Petare, aprendieron varias técnicas para conectarse dignamente con su feminidad y su menstruación. Este es el segundo taller que organizamos para difundir las historias de nuestro especial Mujeres que rompen la regla y sensibilizar sobre cómo combatir la pobreza menstrual en Venezuela
–Este es el orden: primero una tela clarita, luego cuatro filtros absorbentes, después viene el plástico y por último la otra tapa de tela, la que es más colorida. Así se arma la toalla de tela, así debe quedar pero ese no es el orden en el que vamos a coser. –
De esta manera, América Villegas explicó cómo armar toallas sanitarias ecológicas a las 17 mujeres que asistieron al segundo taller de Mujeres que rompen la regla, un formato de difusión offline diseñado por Historias que laten en los laboratorios de la Fundación Gabo y Solutions Journalism Network con el apoyo de Tinker Foundation.
El jueves 30 de septiembre uno de los salones del Colegio Fermín Toro y la Escuela Básica Pedro Felipe Camejo, ubicados en Barrio Nuevo de Petare, Caracas, se convirtió en el espacio para romper con el tabú de la menstruación y aprender sobre nuestro cuerpo.
Génesis Carrero comentó las historias que integran nuestro especial Mujeres que rompen la regla, para dar un contexto sobre la pobreza menstrual a las asistentes y mostrarles que son muchas las que deben padecer ese problema: 9 de cada 10 mujeres en Venezuela, según datos de la ONG Avesa.
El taller estuvo a cargo de América Villegas y Carmen Moreno, doulas de Parir con placer, un proyecto que brinda acompañamiento psicoemocional durante el embarazo. América enseñó sobre el ciclo menstrual, los cambios que viven las mujeres todos los meses, desmentir varios mitos que giran en torno a la menstruación, responder varias dudas sobre el tema y compartir información sobre toallas y copas menstruales.
Carmen dirigió un ejercicio de meditación y relajación para que todas pudieran conectar con su cuerpo y visualizar lo que habían aprendido sobre su vientre y acabar con los estigmas.
A mitad de mañana comenzó el taller de costura para confeccionar sus propias toallas sanitarias de tela. Hicieron patrones, vieron los diferentes modelos que se pueden realizar, cosieron con destreza y en poco tiempo mostraron unos trabajos hermosos y unas sonrisas de felicidad por ese momento que muchas definieron como “increíble”.