por JAKELINE SANDOVAL | Jun 11, 2010 | Crónicas
Daniel Grau suspira largo y lo dice, cuando mira el cielo azul que se junta con el mar y las casas multicolor con sus jardines: –Las Islas Malvinas están bellas. Ya no hay alarmas, ni gritos en la oscuridad, no más bombas, ni ataques, ni barro en las aceras, ni verdes...