por Arantxa López C. | Jul 15, 2018 | Crónicas, Esto es cotidiano
Detrás de la línea amarilla hay una mujer. Es joven, alta y se ve cansada. En su espalda carga un morral que no cierra. Su mano izquierda sujeta un envase vacío y una colchoneta, su mano derecha sostiene una mano mucho más pequeña, la de una niña de unos cinco años...