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Tres mil personas podrían ver a Caracas y tratar de dibujarla, y el resultado sería tres mil Caracas distintas. Porque cada una tendría el estilo de la persona que la ilustra. Una de esas miradas las plasma Ricardo Aveledo en sus piezas. Para él, Caracas es una ciudad caótica, pero cuando la lleva al papel es un recuerdo. Un momento lleno de calma que se muestra a través de la tinta. Bocetos de lo que fue esta urbe en algún momento. Aquí narra cómo percibe esa ciudad que busca inmortalizar más allá de su añoranza.

 “La ilustración para mí es plasmar el mundo que te rodea, es como una foto que haces con tus propias manos. Tú puedes decirles a tres mil personas que le tomen foto a una flor y la flor siempre se verá igual o parecida. Pero si les dices que dibujen tendrás tres mil flores distintas con tres mil estilos diferentes.

Al principio hacía bocetos de ciudades del mundo para pulir mi técnica. Descubrí cómo editar, hacerlo más profesional. En 2018 me di cuenta de que había proyectos como el de Gatobotz, Caracas ilustrada, Greetingsccs, que representaban a la ciudad pero no eran bocetos a mano, no eran sketches en blanco y negro como lo que yo hacía en tinta. Había un montón de gente dibujando ciudades como Nueva York pero no a Caracas, y decidí hacerlo yo porque es más fácil trazar las líneas de los lugares que has recorrido.

Dibujaba y publicaba todos los días, esta vez desde mi cuenta de redes, así llegué a 180 dibujos. Fue un boom, la gente me empezó a seguir, llegué a seis mil seguidores, incluso pude hacer un evento en una galería de Prados del Este. Me conocieron.

Siempre me gustó dibujar, desde pequeño tenía habilidad para esto. Cuando estaba en primaria, mamá nos llevaba a mi hermano y a mí los fines de semana a clases con una señora que vivía en La Carlota, Ofelia león. Con ella aprendí sobre color, pintura, formas, desarrollé destrezas. 

Dejé de dibujar por mucho tiempo porque estaba concentrado en mi carrera; soy ingeniero informático graduado de la Universidad Católica Andrés Bello. La ilustración y el diseño son un pasatiempo, mi trabajo actual es desarrollar aplicaciones en Android. En el año 2017 vi que muchos artistas publicaban sus trabajos en Instagram y vi una oportunidad para aprovechar mi talento con el dibujo. Me gustaba un artista de Nueva York que tiene un estilo parecido al mío y me inspiró. En noviembre de ese año decidí abrir una cuenta anónima y publiqué un dibujo que hice ese mismo día, así comencé.

Yo hago urban sketches, son bocetos urbanos de lugares, sitios de la ciudad. Te buscas una plaza o cualquier lugar que quieras, haces un boceto y no tiene fin. Si lo quieres terminar en algún momento lo terminas, si lo quieres dejar como está pues lo dejas así, es hasta donde quieras, no es tan formal. Es lo que me gusta, que parezca que el dibujo no terminará, se seguirá construyendo aunque el lugar sea el mismo.

Mi estilo es en tinta negra con fondo blanco y algunos detalles a color. Dibujos con líneas que no son perfectas, varios entramados de líneas paralelas que le va dando volumen y creando sombras al lugar. Juego con la perspectiva, resalto algunos colores en elementos que permiten que reconozcas el sitio.

Los detalles son los que permiten que alguien ubique o reconozca ese lugar que dibujé, ahí es cuando pienso que es un dibujo exitoso. Que los reconozcan pero también que conecten con ese espacio, que lo sientan.

A Caracas y a Venezuela las veo perdidas. Me cuesta verla como una buena opción para una persona joven. Sí hay un montón de oportunidades, pero no es para todos. Puede tener una visión privilegiada porque no todos pueden irse, pero si alguien tiene una pequeña posibilidad de salir debería aprovecharla.

Yo me fui de Venezuela en agosto de 2019. Estaba terminando la tesis y me ofrecieron un puesto en Smarmatic Panamá, así que acepté. En julio de 2020 di el paso de migrar a Madrid, España, me compré un iPad y este año empecé un proyecto que se llama Madrid 365, todos los días hago una ilustración de la ciudad, ya llevo 137. Eso me ha ayudado a internacionalizar mi trabajo. Recibo comentarios positivos, mensajes de personas que recuerdan ese lugar en el que estuvieron, que alguna vez visitaron y al cual no saben si volverán en algún momento.

Caracas para mí es muy caótica. Tiene una arquitectura impresionante pero la dibujo desde la nostalgia. Quiero recordar los lugares en los que estuve, es como mostrar lo que fue y no lo que realmente es o podría ser y así lo sienten quienes ven mis sketches.

Los primeros 180 dibujos son los lugares más llamativos, en su mayoría edificios y algunos están enmarcados con la silueta de la vegetación. Tengo la lista de lo que llevo y de todos los pendientes que seguiré cuando termine Madrid 365. 

Quiero seguir creciendo, seguir publicando mis dibujos, que se siga conociendo mi proyecto, llegar a los diez mil seguidores. Vendo impresos de mis ilustraciones, originales que enmarco y envío, eso me genera ingresos, me ha ido muy bien con eso. También planeo ordenar las 180 ilustraciones que tengo de Caracas, editar y poder publicarlas en un libro.

También quiero ilustrar los restaurantes de Caracas, sobre todo los de comida china, esos donde uno compartió muchas salidas con los amigos. Será como dibujar esos recuerdos de la gente”.