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Langostas, pangas y cocaína

—¡Ay, Dios mío, ahora sí se complicó esto! –lamenta el capitán de fragata Wilfredo Castañeda–. ¡Ay, Dios mío, ahora sí va a estar difícil esto! A punto estaba el capitán de iniciar su explicación sobre la carta náutica que tiene pegada en la pared de su oficina, al...

La muerte de Pen-Pen

El cadáver de Pen-Pen todavía está manejable; aún respiraba hace apenas seis horas. Lo tienen sobre una camilla metálica, envuelto con una sábana blanca manchada por la sangre que sale de los orificios. Miriam, la madre, está sentada cerca. Los grandes rulos en su...